Definitivamente los precios importan, pero ya no son suficientes, ni son el factor decisivo en una estrategia comercial. Hoy tienes dos opciones:
- Dar precios rebajados y lograr consumidores que te compren una sola vez.
- Combinar buenos precios dando mayor valor, es decir, calidad, cuidado y atención, logrando con esto compras regulares.
Seguramente escoges la segunda opción y esto lo lograrás personalizando las experiencias de tus clientes y superando sus expectativas, donde el foco principal siempre será el consumidor.