Durante mucho tiempo, Google no daba datos específicos de cuánto dinero ingresaba YouTube. Esto hacía que fuesen los propios analistas de mercado los que se encargaban de hacer esas cuentas vía estimación. Esto también hizo que las cifras de YouTube se hiciesen un tanto a lo grande. Las estimaciones eran muy optimistas y daban por supuesto que la red de vídeos era una mina de oro. Cuando los primeros datos específicos de YouTube se hicieron públicos, no fueron exactamente tal y como se esperaban.

Aun así, las cosas han cambiado bastante desde entonces y YouTube se ha acabado convirtiendo en la gallina de los huevos de oro que los analistas esperaban. Las últimas tendencias del mercado han favorecido a la plataforma.

Por un lado, los marketeros están apostando cada vez más al vídeo online y a posicionar sus campañas en este terreno, lo que lleva a un mayor interés por la inversión publicitaria en vídeo. Por otro, el contexto de los últimos dos años ha beneficiado a la red de vídeos, ya que ha llevado a que las tasas de visionado de contenidos suban.

Todo ello lleva a que los ingresos publicitarios de YouTube se disparen. La red de vídeos se ha ido movimiento por máximos desde el cuarto trimestre de 2020, cuando superó ampliamente la trayectoria previa y se puso en los 6.900 millones de dólares de ingresos publicitarios.

Tras una caída en el primer trimestre del año (explicable porque se pasó de la campaña de Navidad a un período sin momentos de tanto tirón), cuando bajó a los 6.000 millones de dólares, YouTube se ha mantenido en 2021 en picos de ingresos.

En el segundo trimestre superó todos los registros previos y se situó en los 7.000 millones de dólares de ingresos. En el tercer trimestre, del que se acaban de dar los datos financieros de Google, la red de vídeos ha llegado a los 7.200 millones de dólares.

Esta cifra supone un récord en los ingresos generados por YouTube y está muy lejos de los menos de 4.000 millones que ingresaba en el cuarto trimestre de 2018. Comparando con lo que ocurría en el mismo trimestre de 2020, supone un crecimiento del 43% interanual.

Lo que explica este crecimiento

Los anuncios de YouTube no se han visto afectados, como recuerdan en Warc, por los lastres del trimestre. Otras compañías, como Facebook, han asegurado ya que los cambios en privacidad en Apple han afectado ya a sus ingresos publicitarios. YouTube, sin embargo, ha resumido como un impacto “modesto” el golpe que ha tenido. Esto es, lo que Apple está haciendo le está haciendo muy poco daño.

A eso hay que sumar que el consumo de contenidos de YouTube está creciendo en nuevos entornos. Google ha asegurado que las televisiones conectadas son las pantallas en las que más crece el consumo de sus contenidos. Esto resulta especialmente interesante para sus ingresos publicitarios, porque esas pantallas son uno de los espacios emergentes para el gasto publicitario.

Y, finalmente, YouTube se está intentando posicionar como una pasarela para el shopping, con experiencias shoppables. El ecommerce y las ventas son los grandes motores de la publicidad.

En la presentación de resultados de Google, ya quedaba claro que YouTube era uno de los grandes motores que explicaban sus buenos números.