Durante las próximas semanas muchos trabajadores van a tener que aprender a operar desde casa. Una metodología de teletrabajo que en España sigue siendo minoritaria y ocasional. Además de actitudes y consejos concretos para el teletrabajo, Sodexo ha recopilado cuatro metodologías laborales aptas para mejorar el rendimiento.
Miriam Martín, Directora de Marketing de Sodexo Beneficios e Incentivos destaca la importancia de “conocer diferentes técnicas para aprender a gestionar nuestro tiempo en épocas en las que tenemos que adaptarnos rápidamente a una nueva forma de trabajar”.
Técnica Pomodoro
A finales de los años ochenta el consultor italiano Francesco Cirillo desarrolló esta técnica con la intención de aumentar la eficiencia en el trabajo.
El método consiste en dividir la jornada laboral en intervalos de 25 minutos – a estos periodos se les denomina ‘Pomodoros’ – separados por una pausa de cinco minutos. Durante esos ‘Pomodoros’ el trabajador debe dedicarse a una tarea en concreto sin distracciones. Cada cuatro ‘Pomodoros’ se recomienda tomar un descanso más largo de unos 15 o 20 minutos.
Este método se basa principalmente en la idea de que las pausas establecidas pueden mejorar la agilidad mental y la productividad a la hora de realizar las tareas asignadas en el día a día.
Técnica ‘Comerse la rana’
La clave para ser más productivo es aprender a priorizar las diferentes gestiones que hay que llevar a cabo a lo largo del día. Se tiende a dejar para el final las tareas más complicadas y, al llegar con menos energía, se acaban dejando para otro momento. Teniendo en cuenta este comportamiento, el autor Brian Tracy ideó la técnica ‘cómete una rana’, basada en la cita del escritor Mark Twain: “Cómete una rana viva a primera hora de la mañana y nada peor te ocurrirá a lo largo del día“. Lo que recomienda esta metodología es que es mejor empezar por la tarea más difícil o “desagradable”, y así el resto parecerán más sencillas. Esta técnica evita la procrastinación y hace que la jornada laboral sea más productiva.
Estos métodos nos permiten tomar el control de nuestro tiempo y ajustar la jornada para mantener la productividad.- Miriam Martín
Regla de los dos minutos
Este método consiste en establecer la norma de realizar inmediatamente aquellas tareas que conllevan menos de dos minutos. El objetivo de esta técnica es dejar de pensar y apuntar las gestiones que hay que hacer y simplemente realizarlas en el acto. La regla de los dos minutos surge a partir del método Getting Things Done (GTD) desarrollado por David Allen y evita sucumbir a la posposición constante de actividades.
Método Ivy Lee
Ivy Lee fue un profesional de las Relaciones Públicas que a principios del siglo XX diseñó una técnica consistente en realizar, al final de la jornada laboral, una lista de las seis cosas más importantes para el día siguiente.
La clave está en no centrarse nunca en más de seis tareas y disponerlas por orden de prioridad, colocando en primer lugar la más urgente. De esta forma, al día siguiente ya está organizada la jornada y el empleado puede centrarse en ir realizando las tareas por orden.
Esta metodología evita el multitasking (multitarea) ya que obliga a centrarse únicamente en una tarea y no pasar a la siguiente hasta tacharla de la lista. Aquellas tareas que no se han completado se pasan en orden a la lista del día siguiente