Aunque el propósito no es en modo alguno el factor más decisivo a la hora de guiar las decisiones de compra del consumidor, sí puede favorecer a las marcas cuando el cliente es confrontado con productos y servicios muy similares entre sí.
Puede que el propósito no sea el principal faro del consumidor a la hora de guiar sus decisiones de compra, pero sí realza los atributos de las marcas cuando el cliente navega en un mar de uniformidad. Así se desprende al menos de un reciente estudio llevado a cabo en Estados Unidos por Ipsos.
El informe concluye que la confianza del cliente en la calidad de los productos y los servicios de las marcas es el factor que más influye en las decisiones de compra del consumidor (50%).
Gozan también de un rol preponderante en las decisiones de compra del consumidor el hecho de haber previamente utilizado una marca en particular (39%), que haya de por medio algún descuento o promoción (38%) y que los productos y los servicios de la compañía hayan sido agasajados con reseñas positivas por parte de otros clientes (37%).
El 23% de los consumidores considera igualmente relevante que la marca en la que ha decidido posar la mirada sea producida localmente, mientras que el 21% concede muchísima importancia al precio y el 21% se guía por las recomendaciones de amigos y familiares.
En cambio, solo el 12% estima importante a la hora de tomar una decisión de compra que sus productos sean sostenibles y coadyuven a la protección del medio ambiente. Igualmente parca es la proporción de consumidores (10%) que busca que las marcas estén convenientemente alineadas con sus propios valores a la hora de tomar decisiones de compra. Y apenas el 7% de los consumidores se fija en el impacto positivo de las marcas en la sociedad cuando tiene que tomar decisiones de compra.
Menos aún influye en las decisiones de compra del consumidor el hecho de que las marcas sean populares o estén de moda (5%).
El propósito es un importante elemento diferenciador cuando las marcas son virtualmente idénticas entre sí
Si bien del estudio de Ipsos se colige que el propósito no es en modo alguno el factor más decisivo a la hora de guiar las decisiones de compra del consumidor, sí puede favorecer a las marcas cuando el cliente es confrontado con productos y servicios muy similares entre sí.
Asumiendo que los atributos de las marcas sean virtualmente idénticos, la mayor parte de los consumidores sí elegiría un determinado producto o servicio en base al propósito de las empresas que están parapetadas detrás.
El tipo de propósito que deciden enarbolar las marcas impacta asimismo en su trascendencia en las decisiones de compra del consumidor. En términos generales al consumidor le agrada más que las marcas hagan donaciones a organizaciones locales o que sus prácticas de negocio redunden en la protección del medio ambiente que elijan cobijarse bajo la sombra de determinados posicionamientos políticos.
Dos terceras partes de los consumidores coinciden en señalar que comprar marcas sostenibles marca efectivamente la diferencia en la protección del medio ambiente y el 55% dice que tiende a comprar los productos y los servicios de compañías comprometidas con la restricción de su impacto potencialmente corrosivo en la naturaleza. En cambio, solo el 33% de los consumidores da cuenta de una mayor predisposición a comprar los productos y los servicios de las marcas con las que están alienados en el plano político.
Por otra parte, el 51% de los consumidores se muestra a favor de que las marcas hagan gala de su neutralidad en asuntos sociales, el 54% espera a que las marcas se involucren en iniciativas sociales y medioambientales de naturaleza local y el 53% no hace ascos a pagar más por productos cuyo proceso de fabricación implica una reducción de la huella medioambiental.
Fuente: https://www.marketingdirecto.com/anunciantes-general/anunciantes/proposito-no-aguijonea-ventas-elemento-diferenciador