Presentado por los estudiantes de la clase de Individuo, Sociedad y Consumo: Valentyna Gómez, Geronimo Acosta, Luis Jacobo Osorio, Juan José Charry.
La tecnología está cada vez más cerca de la perfección. Suena cliché, pero los avances en la inteligencia artificial me generan temor sobre el futuro que le depara a la humanidad. Por un lado, si nos enfocáramos en el presente, podríamos decir que AI(artificial intelligence) es un mecanismo práctico y rápido si se necesitan respuestas sobre cualquier tipo de tema relacionado con el saber humano. Por otro lado, puedo reconocer que lo desconocido siempre suele asustar al inicio, pero ¿hasta qué punto la inteligencia artificial puede ayudarnos como personas? Nuestra imaginación suele limitarse al pensar en el método de realización de las cosas, pero si hubiese algo que convierta lo que imaginamos en algo tangible, ¿deberíamos temerle? En el siguiente artículo hablaremos sobré la inteligencia artificial y al final usted tendrá la tarea de decidir si temerle o no.
Técnicamente, la inteligencia artificial es la simulación de procesos de inteligencia humana por parte de máquinas, especialmente sistemas informáticos. Estos procesos incluyen el aprendizaje, el razonamiento y la autocorrección. También, permite que los sistemas tecnológicos perciban su entorno; se relacionen con él, resuelvan problemas y actúen con un fin específico. Por lo anterior, podríamos decir que AI es capaz de cumplir con la parte cognitiva del ser humano. Puede pensar, razonar, relacionar y establecer posibles soluciones pragmáticas a incógnitas. A este punto, seríamos capaces de juzgar a Platón por una de sus teorías más conocidas, la cual afirma que: la razón es la mayor capacidad de conocimiento del ser humano y sería la encargada del conocimiento del mundo inteligible. Es por tanto el rasgo distintivo del ser humano, y lo que nos permite llegar a la verdad. (Platón, 427 – 347 a. C.) Sin embargo, la razón ya no es un atributo único en los seres humanos. Pues los avances tecnológicos han logrado que el único rasgo que nos diferenciaba de los animales ahora lo tenga una máquina NO viva.
Siempre hubo un gran temor por los avances tecnológicos, pues se piensa que en algún momento estos serán capaces de suplantar cada una de las actividades humanas; los empleos, los cargos públicos, los sentimientos y hasta las mismas personas. Por la anterior, la inteligencia artificial (IA) no ha estado exceptuada en este pensamiento, ya que esta tecnología ha cambiado la forma en que las empresas y las industrias operan. Algunos trabajos que antes eran realizados por humanos, ahora pueden ser automatizados y realizados por máquinas que utilizan la IA. Esto ha llevado a la eliminación de algunos trabajos, lo que ha causado desempleo en ciertas industrias. Especialmente en industrias manufactureras, pues ha llevado a la reducción de la necesidad de trabajadores humanos en ciertas áreas de la línea de producción. De manera similar, en el sector de servicios, la automatización de tareas como el servicio al cliente, la contabilidad y la gestión de la cadena de suministro ha reducido la necesidad de trabajadores humanos en estas áreas.
Para concluir, es claro que hay muchos beneficios en la utilización de la Inteligencia Artificial, pero también se evidencian grandes temores y desventajas para la vida cotidiana del humano. Por un lado, considero que en el presente somos capaces de acoplarnos a lo que la tecnología nos ofrece; facilidad, asequibilidad y tangibilidad. Por otro lado, pienso que el futuro es incierto y hay que enfrentarlo de la mejor manera, aceptando cambios y avances en la vida. Aún así, no descarto que mi próximo artículo en el año 2080 sea escrito por un humanoide con mi aspecto y mi nombre.