Mientras el 79% de los consumidores de entre 18 y 25 años no tienen prurito alguno en pagar más por productos sostenibles, esta proporción desciende al 57% en el caso de los consumidores mayores de 56 años.
Pese a que las estanterías de los supermercados están cada vez más surtidas de productos sostenibles, el consumidor rehúye a menudo de tales productos porque sus precios suelen ser notablemente más elevados que los artículos que no tienen la vitola de sostenibles. Sin embargo, la sensibilidad del consumidor al precio (generalmente elevado) de los productos sostenibles es fuertemente deudora de la edad y el género.
En términos generales los consumidores más jóvenes endilgan más valor a los productos sostenibles que los consumidores más talludos. Y están también, por ende, más prestos a abonar precios más elevados por este tipo de productos.
De acuerdo con un reciente estudio llevado a cabo en Alemania por la consultora Deloitte, el 67% de los consumidores dan cuenta de su disposición de pagar algún tipo de recargo por productos fabricados de manera sostenible (cuya producción sea, por ejemplo, de naturaleza regional o en cuya elaboración hayan sido utilizados ingredientes naturales).
La sensibilidad del consumidor al precio de los productos sostenibles es menor entre los jóvenes y también entre las mujeres
Las respuestas puestas sobre la mesa por el consumidor difieren en todo caso de manera ostensible en función de su edad. Mientras el 79% de los consumidores de entre 18 y 25 años no tienen prurito alguno en pagar más por productos sostenibles, esta proporción desciende al 57% en el caso de los consumidores mayores de 56 años.
La manera en que el consumidor se relaciona con los productos sostenibles está también hasta cierto punto a expensas del género. Las mujeres no hacen ascos a pagar hasta un 31% más por productos sostenibles. En cambio, los hombres toleran incrementos en el precio de apenas un 23%.
Según el informe de Deloitte, la sostenibilidad hace más tilín al consumidor en los productos alimentarios (53%) que en los productos ajenos al universo de la alimentación (49%).
En los últimos años la sostenibilidad ha dejado de ser una opción para las empresas para convertirse en un «must» absolutamente irrenunciable.
Fuente: https://www.marketingdirecto.com/marketing-general/tendencias/jovenes-duelen-menos-bolsillo-productos-sostenibles