Ser freelance implica muchas cosas, y una de ellas es el estrés cuando hay falta de organización
La vida del freelancer puede ser un buen camino para trabajar de lo que más te guste, disponiendo siempre de tu tiempo y eligiendo lo que quieres hacer en cada momento. O también puede ser camino hacia el estrés y los problemas si no te organizas de una manera adecuada. ¿Cómo organizarte como freelancer? En este artículo te damos algunas pautas referidas a las herramientas que necesitas para gestionar tus tareas, por qué es importante el rigor propio y administrar adecuadamente tu tiempo y algunos tips sobre cómo tener los números al día y evitar mareos y sorpresas poco agradables.
Las mejores herramientas gratuitas de gestión de tareas
Una de las tareas más complicadas para todo freelancer es gestionar las tareas de una manera eficiente y fluida. Por suerte, internet provee de muchas aplicaciones, softwares y programas gratuitos para ayudar al freelancer a organizarse mejor.
Monday.com se configura como una suerte de espacio de trabajo real a través del cual el usuario puede ver tareas en curso, las urgentes y las ya que se han completado. Algo similar es Teamwork, pero en este caso resulta muy útil para gestionar tareas en equipos con freelancers ubicados en diferentes partes del mundo.
Para quienes estén acostumbrado a trabajar con listas, Todoist es una de las mejores opciones en este sentido. Y una de las herramientas gratuitas más completas para trabajar como freelancer es Microsoft To Do, a través de la cual se pueden crear resúmenes de un día de trabajo, configurar un planificador personalizado con sugerencias de tareas, compartir listas y tareas compañeros y sincronizar las tareas con Outlook. Busca y consulta las mejores herramientas gratuitas de gestión de tareas para freelancers.
La importancia de la disciplina y la gestión del tiempo
Gestionar bien el tiempo y tener disciplina en el trabajo son dos aspectos imprescindibles para todo trabajador freelance. Y, con respecto a esto, hay que tener en cuenta algunas consideraciones.
La primera es que hay que prestar mucho cuidado a la tendencia de decir siempre que sí a cualquier encargo, algo habitual en el trabajo freelance ya que nunca se sabe cuando se avecina una mala época. El riesgo de aceptar todo es, justamente, no poder cumplir con todo y estresarse demasiado. Eso atenta contra tu reputación como freelancer en caso de que no puedas asumir el pedido (y todo freelancer vive de su reputación) y también contra tu salud mental.
Es por esto que siempre se recomienda asumir metas posibles, ser consciente de lo que puedes dar y lo que no, y de esta manera ir gestionando tu tiempo hasta lograr un equilibrio entre buen volumen de trabajo y momentos necesarios de descanso y de ocio.
Resulta de mucha ayuda identificar aquellos periodos de tiempo en los que eres más productivo o sientes que rindes mejor. Eso es muy personal: algunas personas son mucho más productivas por la mañana, otras por la tarde. ¿Cuál es tu franja horaria más productiva? Identifícala y potencia tu trabajo desde ahí.
Tener los números al día sin dolores de cabeza
De las cosas que más agobia al freelancer es dedicar tiempo para tener todas las cuentas y declaraciones al día y bien hechas. Si no te manejas bien con los números y no te sobra el tiempo, lo mejor es que contrates a un gestor para que te ayude a administrar tus facturas y se haga cargo de presentar las declaraciones de IVA, IRPF y renta. No te costará mucho dinero y podrás estar con la tranquilidad de tener todo al día y en orden.
La organización vence al tiempo
A modo de conclusión, podemos afirmar que una adecuada organización en la gestión de tareas, de la eficacia en el trabajo y de las franjas horarias durante el día es ideal para vencer al tiempo. Es decir, para que el tiempo esté sometido a nuestro ritmo y que nunca sea al revés, que el freelance no se agobie con plazos de entrega imposibles ni se autoexplote. Si el tiempo es dinero, el objetivo es usarlo a nuestro favor.