Editorial
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Los inicios de este año 2009, han estado marcados por un ambiente turbulento, que ha puesto en cuestionamiento público, no sólo modelos económicos y políticos, sino también conceptualizaciones gerenciales, empresariales y educacionales. Elementos básicos como: ética, responsabilidad social empresarial y profesional, sostenibilidad, producción de verdadera riqueza, papel del gobierno y de los mecanismos de regulación entre otros, han ido apareciendo en el proceso de encontrar causas y posibles soluciones a la crisis.
Pero simultáneamente, en todos los ámbitos geográficos y culturales, aparecen como grandes fuerzas positivas para la solución de este gran conflicto: las políticas de promoción y desarrollo del espíritu y la cultura empresarial (Entrepreneurship) y las políticas de estímulo y apoyo a la PyME. Cada país ha ido incorporando estos dos grandes conceptos en sus políticas de desarrollo empresarial, económico y educacional. Por el otro lado, en todos los países empiezan a aparecer instituciones y personas que enfocan sus procesos de investigación y de asesoría a estas dos importantes áreas profesionales y académicas.
En el ICSB Conference, realizada en Corea en este mes de junio, estos temas florecieron en todas las conferencias magistrales, en todos los páneles y en muchísimas de las sesiones paralelas. Lois Stevenson, hizo unas radiografía muy interesante sobre el estado del arte y el espectro amplio de frentes que estas áreas tienen, y planteó que es fundamental, al formular políticas integrales para el desarrollo de la PyME y de los procesos de creación de empresa (Entrepreneurship), involucrar muy bien todas las variantes que en ellas intervienen. Ella insistía , en la necesidad de generar apoyos para todos los diversos tipos de empresarios que existen: capitalistas, de estilo de vida, de alto crecimiento, innovadores, sociales, académicos, de Spin–off, cívicos, socialmente responsables, asociativos , etc.; y yo añadiría, que este tipo de recomendación nos debe llevar en nuestro idioma a hacer un entendimiento integral del significado de la palabra “Empresario” y dejar de estar inventando palabras que no corresponden a la razón central de estos procesos de creación de valor, bienestar, empleo, satisfacción y riqueza de todos los tipos.
Debe ser claro para todas las personas, académicas o no, que quien crea actividades empresariales de cualquier tipo: muy pequeñas, pequeñas, medianas, grandes; individuales, familiares, colectivas; gacelas, de base tecnológica o tradicionales: formales e informales; públicas, privadas o mixtas; orientadas a la utilidad personal o al beneficio social; en forma independiente o dentro de una corporación; son empresarios/empresarias o miembros de un equipo empresarial.
Por otro lado, insistía Lois, que es muy importante tener claridad en las políticas que se formulen, para no confundir las políticas sectoriales, con las de desarrollo económico, con las de PyME, con las de creación de empresa, con las de innovación, con las de crecimiento económico, etc., pues todas ellas tienen sus particularidades en objetivos y en mecanismos operativos.
Todos estos temas y muchos más, son los que debemos trabajar en nuestros países latinoamericanos para encontrar las soluciones que nos sean propias, pues no podemos pensar que las soluciones a nuestras dificultades nos llegarán de otros lados. Por ello, el XX Congreso Latinoamericano sobre Espíritu Empresarial que se realizará en la Universidad Icesi entre el 7 y el 9 de octubre del 2009, enfocará sus esfuerzos académicos a generar espacios de discusión sobre todos estos temas, de forma tal que podamos encontrar alternativas múltiples de solución a esta crisis que ya ha afectado bastante a nuestros países.
Con gran complacencia, comparto con todos los lectores de Innovando dos hechos muy importantes : el primero hace relación al hecho de que el Centro de Desarrollo del Espíritu Empresarial de la Universidad Icesi (CDEE-ICESI), esté completando 25 años de importante actividad académica especializada en los temas de: Creación de Empresa, Desarrollo del Espíritu y de la Cultura Empresarial, Educación Empresarial, Gestión de Empresa Familiar y Gestión de PyME; habiendo servido de modelo de muchísimas instituciones latinoamericanas, que posteriormente se han integrado a estas temáticas. Y segundo, la distinción que el International Council for Small Business (ICSB) me ha otorgado al incluirme en el selecto grupo de los White Wilford Fellows, grupo que integra a distinguidos investigadores mundiales, que a juicio de esta entidad mundial han hecho contribuciones significativas al desarrollo de estas áreas del conocimiento. Esta distinción es en realidad un reconocimiento a la labor de todo el grupo humano que en estos 25 años ha trabajado en el CDEE-Icesi y han ayudado a construir conocimiento en estas áreas.
Los espero a todos en las deliberaciones del XX Congreso Latinoamericano sobre Espíritu Empresarial.
Cordial saludo,
Rodrigo Varela V., Ph.D.
Director
Centro Del Desarrollo Del Espíritu Empresarial
Universidad Icesi