Y al final, ¿qué queda?

El final no ha llegado, pero se anuncia. Retumba su proximidad.

A menos de cinco meses del cierre definitivo del proyecto, comienzan los balances.
Se recogen los aprendizajes, las vivencias, los frutos.

El proyecto Fortalecimiento de las capacidades locales de investigación y desarrollo de las lenguas nativas existentes y en peligro de extinción del Vaupés ha sido un proceso profundamente enriquecedor desde sus inicios.
Por su naturaleza interdisciplinaria, el proyecto ha enfrentado múltiples retos y conflictos, que, a pesar de todo, le han dado paso a reflexiones importantes y a la formulación de nuevas y mejores preguntas.

Diciembre de 2023. Yacayacá, Vaupés. Foto tomada por el equipo del proyecto durante salida de campo.

Este ha sido un proceso nutrido e intrincado:
Con altibajos, pausas y remontadas.

Ha sido un proceso de traducción constante en el que los territorios y sus voces han hablado sin cesar para construir una polifonía de saberes diversa, compleja y enriquecedora. Una polifonía que ha trascendido el mero cumplimiento de los objetivos trazados para darle paso a relaciones personales y sociales que ayuden a  fortalecer y salvaguardar las lenguas nativas del Vaupés.

Diciembre de 2023. Yacayacá, Vaupés. Foto tomada por el equipo del proyecto durante salida de campo.


¿Qué queda entonces del proyecto?

Quedan infinidad de aprendizajes, preguntas, relaciones, memorias y risas…
Quedan puentes por tender: futuros y mejores proyectos que se avecinan; que tienen la premisa de continuar con los esfuerzos sembrados para potenciarlos.
Quedan saberes: tejidos pacientemente por el intercambio de la palabra y de la acción en el territorio y a la distancia.

¿Qué más queda?

Seguro mucho más que no sé, o que no puedo nombrar.

Pero lo que veo ahora es un camino muy enriquecedor lleno de aprendizajes, retos, historias, y personas maravillosas. Un camino de aprendiz eterna.
Un proceso colaborativo en que el crecimiento personal y profesional, ha sido también colectivo. Un proceso amplio en que los esfuerzos por fortalecer y salvaguardar las lenguas nativas del Vaupés han trascendido hasta transformarse en fuente de poder y cambio.
Y en últimas, un proceso que se ha quedado en nuestros corazones y memorias.

Febrero de 2024. Universidad ICESI, Cali. Foto tomada por el equipo del proyecto durante jornada de trabajo

Y a ti ¿qué te ha quedado del proyecto?

Una experiencia compartida con estudiantes de antropología de la Universidad Nacional.

El pasado 27 de noviembre de 2024, un grupo del equipo del proyecto compuesto por Adela Parra-Romero, Jesús Girón, Camila Ortiz, Yuli Vargas y Nathalia Zuluaga tuvo la oportunidad de participar en el seminario de investigación liderado por la profesora María Emilia Montes en la Universidad Nacional, Bogotá. Este espacio, dirigido a estudiantes de antropología, se estructuró en tres momentos clave que permitieron compartir los logros y retos del proyecto en el Vaupés.

Un primer acercamiento al proyecto

La sesión inició con una presentación general del proyecto, abordando aspectos esenciales como su origen, el objetivo principal, las instituciones aliadas, los pueblos beneficiarios y los compromisos adquiridos. Este contexto técnico permitió a los estudiantes comprender la relevancia y alcance de la iniciativa.

Diversidad lingüística y su relación con el contexto histórico y cultural

Jesús Girón ofreció una ponencia sobre la diversidad lingüística del Vaupés, vinculando este fenómeno con procesos históricos como la colonización, prácticas culturales como la exogamia lingüística, y aspectos naturales relacionados con la biodiversidad amazónica. Además, profundizó en el trabajo con el pueblo cacua, destacando cambios en la clasificación de su lengua: anteriormente parte de la familia lingüística macu-puinave, ahora se reconoce como cacua-nukak.

Un aspecto destacado fue la producción de una cartilla bilingüe (cacua-español) que incluye el mito del Hombre y la mujer sapo, narrado por sabedores y enriquecido con dibujos realizados por niños y niñas de la comunidad. Esta cartilla es un ejemplo del esfuerzo por preservar las lenguas y tradiciones de los pueblos indígenas.

Retos y logros en la colaboración con el pueblo wãchɨnã

Por su parte, Camila Ortiz compartió su experiencia trabajando con los wãchɨnãs. Subrayó los retos enfrentados durante el autodiagnóstico sociolingüístico, derivados de situaciones como enfermedades y calamidades dentro de la comunidad. Esto implicó ajustes en las actividades y tiempos para proteger tanto a los lingüistas comunitarios como a los participantes.

Camila también destacó la creación de una cartilla trilingüe (pisamira, cubeo y español) sobre medicina tradicional y el mito de origen del tabaco. Este trabajo incluyó la colaboración con sabedores y líderes para traducir y documentar el contenido, así como talleres fotográficos que dieron vida al material gráfico.

Un espacio de reflexión y construcción colectiva

La jornada cerró con un diálogo enriquecedor entre los ponentes y los estudiantes, quienes mostraron gran interés por la participación de las entidades públicas en el proyecto. Se enfatizó la importancia de fortalecer alianzas con actores locales y nacionales, así como la necesidad de garantizar la continuidad de este tipo de iniciativas para preservar el patrimonio cultural y lingüístico del Vaupés.

Este encuentro no solo permitió compartir el progreso del proyecto, sino también enriquecer el proyecto a partir de los comentarios de los futuros(as) antropólogos(as), quienes reconocen el valor de las lenguas y tradiciones indígenas.