EL CASO
Author: Andres Lopez Astudillo
El caso de doña GLORIA ESPERANZA GUZMAN, es algo que ocurre comúnmente en el sistema se seguridad social de Colombia. Ella es una mujer de mediana estatura, piel trigueña, cabello rizado, ojos cafés y contextura delgada; tiene 50 años de edad y es pensionada, se dedica a los oficios de su casa y algunas actividades con la comunidad y la asociación de pensionados del magisterio en la ciudad de Popayán, ciudad donde reside.
Padece una enfermedad llamada Síndrome del Manguito Rotador en el hombro derecho, que consiste en una inflamación de los tejidos que cubren los tendones de los músculos encargados de realizar los movimientos de rotación interna y externa del hombro; generalmente puede ser producido por movimientos repetitivos, traumas, posiciones prolongadas por mucho tiempo, movimientos exagerados entre otros factores, lo cual desencadena dolor e inflamación en dichas estructuras, limitando la funcionalidad del hombro en cuanto a fuerza, elasticidad y ángulo de movilidad de la articulación. (Anexo 1).
La señora llevaba más o menos 6 meses desde que inició su dolor hasta que consultó al médico para ponerle fin a este.
Cuenta doña Gloria Esperanza: “Le dije al doctor que me dolía mucho el hombro y que casi no lo podía levantar; inicialmente me formuló unos medicamentos para el dolor y que consultara en 1 mes nuevamente para ver como seguía con el dolor y que si no me pasaba volviera antes”.
Como evidentemente el dolor persistía a pesar de los medicamentos, una semana después doña Gloria llamó nuevamente para sacar la cita pero se la dieron para 15 días después.
Dice doña Gloria: “El dolor desaparecía aunque no completamente cuando me tomaba las pastillas pero apenas pasaba el efecto este se aumentaba. Yo notaba que cada día me dolía más y se me dificultaba mas levantar el brazo. Yo vivía estresada y no podía hacer nada. Además yo sufro de gastritis y de tomar estas pastillas empecé a sentirme mal del estomago”.
Al llegar el día de la cita cuenta doña Gloria: Volví donde el médico y le conté lo que me sucedía y esta vez me cambió el medicamento por otro que no me alteraba la gastritis, pero además me ordenó 10 sesiones de terapia física en vista de que no mejoraba.
Como le recomendó el médico doña Gloria sacó la cita en uno de los centros de rehabilitación física de Popayán con los cuales tenía contrato su EPS Coomeva, donde iniciaron su tratamiento de terapias físicas.
Cuenta doña Gloria: “Saque la cita para las terapias y empecé a asistir todos los días por la mañana. La niña que me atendía (fisioterapeuta) era muy amable me hizo una evaluación y comenzó a tratarme. Me pusieron unas corrientes y otros aparatos con paquetes calientes y a veces fríos. Aunque la terapia era corta el dolor empezó a disminuir”.
Los aparatos a los que se refiere doña Gloria son equipos de electroterapia y ultrasonido, utilizados en terapia física para el manejo del dolor al igual que los paquetes fríos y calientes. Anexo 2
Doña Gloria es atendida cumplidamente todos los días hasta finalizar las terapias que le recomendó el médico. En la Historia Clínica que ella misma muy amablemente facilitó para soportar este caso, aparece una evolución o reporte del fisioterapeuta donde dice: “La paciente evoluciona positivamente y su dolor se califica en 5/10 con mejor respuesta a los movimientos y disminución de espasmos musculares. Se recomienda continuar en tratamiento y plan casero”.
En Fisioterapia se utiliza la Escala Visual Análoga para medir el dolor de un paciente que consiste en preguntarle a este: ¿De cero (0) a diez (10) en cuanto califica dolor? Y dependiendo de la respuesta se califica. Cada paciente tiene derecho a poseer copia de su historia clínica como sucede con doña Gloria. Le entregan un folleto con ejercicios y recomendaciones (Plan Casero), para mantenimiento en casa. Además, se le recomienda continuar en tratamiento pues su dolor aunque ha disminuido continua molestándola.
Justo cuando se alistaba para ir a su terapia ocurre un inconveniente en su hogar debido a que su madre enferma y requiere ser llevada de urgencias a la clínica la Estancia de esta ciudad, de donde luego es remitida a la Clínica Valle del Lili en la ciudad de Cali por su delicado estado de salud, su estadía se prolonga en esta ciudad puesto que tiene que hacerse cargo de la situación hasta que su madre se recupera; entonces doña Gloria no continua en tratamiento y después de 15 días vuelve al médico general con aumento del dolor, por lo que este decide remitirla al Fisiatra, especialista en este tipo de lesiones para valoración. Luego de 15 días, lo que se demora la cita. Doña Gloria es valorada por el especialista el cual concluye en cambiarle el medicamento y ordenarle 20 sesiones más de terapia física.
Dice doña Gloria: “Como no pude seguir con las terapias el dolor me aumentó nuevamente y me tocó volver al médico, pero esta vez me mandó donde el fisiatra y otra vez me cambiaron la droga y me mandaron más terapias”.
Así, con su dolor agudo nuevamente, doña Gloria regresa a terapia física con la esperanza de mejorar de una vez por todas este mal que la aqueja desde hace un tiempo y muy juiciosa asiste a todas y cada una de las sesiones. En el transcurso del tratamiento tiene etapas de mejoría, pero persiste el dolor y esto posteriormente le genera un estrés agudo que la lleva a presentar tensión muscular en su espalda y cuello convirtiéndose en un malestar físico generalizado que modifica sus emociones.
Doña Gloria: “Las terapias me asentaban bien aunque a veces eran muy cortas, pero el dolor no me pasaba y me empezó a dar mucho dolor de cabeza y de espalda. Yo permanecía de mal humor y muy estresada, me sentía limitada porque ese malestar no me dejaba hacer nada tranquila y tampoco podía dormir bien”.
Durante el tratamiento doña Gloria no consigue gran mejoría aunque las terapias en el hombro le hacían bien y nuevamente es remitida al especialista en fisiatría. Este decide manejarla nuevamente con medicamentos y terapia intentando bajo su criterio dar en el punto del tratamiento donde se presentara alguna mejoría; nuevamente la señora es enviada a terapia, esta vez también son 20 sesiones pero además decide cambiar de centro de rehabilitación para probar otro tratamiento.
Con mucha expectativa va la paciente a su terapia diariamente, pero lamentablemente el resultado no varía mucho y aunque siente alguna mejoría el dolor persiste.
Ella comenta: “yo no sé si es que algo estoy haciendo mal o es que mi lesión es muy grave porque todo lo que me han hecho no me ha servido de mucho. Yo siempre sigo las recomendaciones y aún así me tienen volteando de allá para acá y a veces siento que eso me desgasta más”.
Al no haber gran mejoría, la señora es enviada de nuevo con el fisiatra, y tras pasar 10 días logra ser atendida, pero esta vez decide consultar otro profesional en esta misma área para obtener un punto de vista diferente al ya propuesto. Y efectivamente así es; este nuevo fisiatra intenta una medida más directa para bloquear el dolor y opta por realizarle una infiltración en el hombro. Este procedimiento consiste en infiltrar con una aguja un medicamento (antiinflamatorio, corticoides), directamente en el tendón afectado con el objetivo de suprimir localmente la inflamación buscando disminuir el dolor y acelerar la recuperación del hombro. Anexo 3
Tras realizar este procedimiento el fisiatra recomienda a la señora, guardar quietud al menos 15 días y no volver a terapias porque según él no le van a servir.
Doña gloria: “Este doctor me chuzó con una jeringa en el hombro pero eso no me sirvió, al contrario me aumentó más el dolor y cuando le pregunte que si me iba a formular algo o mandar terapias me dijo que no y me recomendó que no volviera a terapia, que eso no me servía”.
Como este procedimiento no funcionó, la señora decidió consultar al médico general nuevamente; este le formula medicamentos para el dolor y la remite otra vez al fisiatra. Luego de esperar el mismo tiempo que las anteriores citas, doña Gloria vuelve al fisiatra que anteriormente la trataba y este nuevamente le manda terapias.
Doña Gloria: “Ahí si yo me le emberraqué al doctor, porque me tenían como una pelota de allá para acá y no me solucionaban nada. Entonces me mandó para donde el ortopedista”.
El fisiatra al ver el enfado de la paciente y su constante malestar, decide remitirla al ortopedista para valoración y manejo. Luego de un tiempo similar a las citas anteriores la señora consulta al ortopedista. Este realiza la valoración y al estudiar su caso concluye en enviarle unos exámenes para determinar el estado real de su articulación. Para esto le formula una resonancia magnética. Este examen emite un resultado que permite observar imágenes segmentadas en niveles o cortes longitudinales, la estructura interna del hombro o la articulación a evaluar en una placa radiográfica. Anexo 4
Doña Gloria: “Este doctor muy amable y buena gente, me mandó una resonancia magnética y me dijo que con el resultado me decía algo concreto. Entonces yo fui a hacer las vueltas a la E.P.S., para sacar ese examen lo más pronto posible”.
Una vez con el resultado de la resonancia en las manos y luego de un tiempo prudencial, doña Gloria regresa al ortopedista para control. En este tiempo el malestar de la señora ha aumentado. El Doctor revisa los exámenes y concluye que el diagnóstico es un ¨hombro congelado¨, el cual se da como consecuencia del manejo inadecuado de la lesión o ausencia de tratamiento que determina la aparición de adherencias e inflamación entre las estructuras y tejidos de la articulación del hombro, provocando una gran limitación en los movimientos propios del mismo y dolor por inflamación y debilidad de las estructuras. Además, considera que es importante que continúe con las terapias y que el manejo más adecuado para esta su lesión es definitivamente la cirugía.
El Ortopedista al darse cuenta de la situación de la señora, le recomienda consultar un colega suyo que realiza ese tipo de cirugías. Doña Gloria lo consulta particularmente y este le recomienda también, que lo más sensato fuera hacer la cirugía. Sin embargo por ser particular la cirugía tiene un costo elevado.
Doña Gloria: “El ortopedista me dijo que el hombro había empeorado y que ahora estaba congelado. Me dijo que debía seguir con terapias; además me recomendó a otro doctor que es especialista en ese tipo de cirugías. Como era particular me atendió rápido y me dijo lo mismo que el otro, pero la cirugía con él costaba $3.500.000 y eso es muy caro para mí”.
Entonces la señora optó por realizar el proceso de autorización de la cirugía por la E. P. S.
Doña Gloria: “El hombro me duele mucho y ya no me deja hacer nada, tengo dolor de cabeza y me la paso estresada. El ortopedista me recomendó seguir con terapias pero el fisiatra que me infiltró me dijo que eso no me servía, entonces yo no volví; además, yo ya estoy aburrida de que me manden de un lado para otro y quiero que me hagan la cirugía, pero en la E.P.S. se demoran y hay que esperar más para que me la autoricen”.
Tras la recomendación de un fisioterapeuta particular, doña Gloria decide continuar con las terapias para evitar que la lesión siga empeorando y mejorar un poco su dolor mientras realiza las diligencias y autorizaciones para su cirugía en la E.P.S.
Al llevar tanto tiempo sin recibir tratamiento de terapia física, su condición empeoró contando con el tiempo que gastó entre cita y cita. Doña gloria alcanzó a recibir 12 terapias más y su dolor disminuyó; sin embargo, la lesión aún era meritoria de cirugía, la cual finalmente fue autorizada.
Doña Gloria: “A tanto luchar me autorizaron la cirugía, antes de eso hice las terapias y me sirvió porque el dolor del cuello y de la cabeza se me quitó aunque el del hombro continuaba”.
Unos días después la cirugía fue realizada con éxito y doña Gloria lleva más de un mes de recuperación y se siente bien. Refiere sentir dolor pero no como antes para lo cual debe regresar a terapias con el objetivo de rehabilitar su hombro y mejorar su calidad de vida.
Doña Gloria: “Ahora me estoy recuperando de la cirugía y el dolor me bajó mucho, me duele algo pero yo creo que es por la cirugía, además yo entiendo que la recuperación es lenta y necesito de más terapias. Espero que esto si funcione esta vez……”
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