Por: Angélica María Contreras
El libro Colombia y el mundo 2010, opinión pública y política internacional, está escrito por Arlene B. Tickner, doctora en Estudios Internacionales de la Universidad de Miami; y Felipe Botero, PhD en Ciencia Política de la Universidad de Arizona. Actualmente ambos son profesores de la Universidad de Los Andes. Ahí se presentan los resultados de la segunda edición de una encuesta sobre las percepciones, opiniones y actitudes de los colombianos respecto al mundo y el lugar ocupado por Colombia en el espacio internacional. Además de eso, se comparan los índices obtenidos con los que habían salido en la edición anterior de esta misma publicación.
Las preguntas de la encuesta varían entre distintos ámbitos: identidad de los colombianos, su relación con el mundo, su percepción sobre acontecimientos mundiales, sus apreciaciones sobre las reglas de juego internacionales, sus impresiones frente a la migración, contacto de los colombianos con el mundo, opiniones sobre la política exterior del país, percepciones sobre las relaciones de Colombia con América Latina y las relaciones con Estados Unidos y España.
Dentro de los índices que son expuestos está la percepción de favorabilidad de los distintos presidentes y su incidencia en la imagen del país. También es posible encontrar temas que son considerados como de “extrema gravedad” según la opinión de los colombianos; entre ellos cabe mencionar el calentamiento global, narcotráfico, crimen organizado, pobreza, escasez de alimentos y armas nucleares. En lo que respecta a la migración, el libro indaga sobre qué piensa la población en cuanto a esta situación. Se muestran resultados donde se analiza qué condiciones son consideradas convenientes para migrar a otro país y cómo funciona la aceptación y el rechazo social hacia los emigrantes y lo foráneo.
Finalmente, los autores plantean una serie de conclusiones relacionadas con los factores principales que conllevan a un precario conocimiento sobre la política internacional del país por parte de la población colombiana. Estos son: intereses individuales, discurso oficial gubernamental, carencia de debate público sobre la política exterior, interpretación de medios de comunicación y otros actores internacionales. Asimismo, al analizar los resultados obtenidos por la encuesta, los lectores pueden construir una postura personal ya que el texto da las herramientas para identificar qué mejoras son necesarias en lo que concierne a dichas percepciones.
Finalmente, considero que vale la pena leer este libro porque permite comparar las diferentes percepciones de los colombianos en distintos años. Lo que construye en el lector un panorama de cómo ha ido cambiando la manera en que la población entiende y prioriza determinados temas relacionados con la arena internacional. A través de esto es posible determinar las falencias existentes con respecto al sistema internacional.