Cómo construir Política internacional a partir del miedo? Una mirada al post 9/11

Nashira Chávez. (2008). Cuando los mundos convergen: Terrorismo, narcotráfico y migraciónn post 9/11. Quito: Abya-Yala.

 

Por: Daniela Salazar

 

Naschira Chávez escribe el libro Cuando los mundos convergen: Terrorismo, narcotráfico y migración post 9/11 como tesis de grado para su maestría en Ciencias Sociales de la Universidad de FLACSO – Sede Ecuador. Su propósito es mostrar cómo la política internacional estadounidense, después del 9/11, hace parte de un proceso de construccionismo social que tiene sus raíces en la supuesta emergencia de un mundo inseguro que sólo puede ser salvado por los norteamericanos. Todo esto sobre la base de una suerte de superioridad moral que ha sido alimentada por cada uno de los presidentes de turno de dicho país.

El libro se encuentra dividido en tres grandes partes: la introducción, el desarrollo y argumentación de las ideas que respaldan la tesis, y las conclusiones. La autora echa mano del análisis histórico para explicar cómo es que la política internacional estadounidense, sobre todo con respecto a Ecuador, ha estado atravesada por una discursiva dentro de la cual se legitiman las maniobras norteamericanas en los países de América Latina. Esta retórica está fundamentada en el terrorismo como un problema que se ha venido acrecentando debido a la migración y el narcotráfico. Lo que implica una intervención inmediata de ellos para que no siga su cauce.

Para desarrollar su tesis central, la autora presenta el problema del terrorismo como una amenaza para la seguridad de Estados Unidos. Lo que se traduce en el surgimiento de una línea ofensiva que toma lugar, sobre todo, luego de los sucesos del 9/11. Chávez analiza este problema a partir de un marco teórico constructivista, tomando como premisa que, después de terminada la Guerra Fría, quedó demostrado que el poderío militar no es el que siempre dirige las tomas de decisiones políticas internacionales de los Estados Unidos.

A lo largo de los capítulos que lo componen, la autora se encarga, en primer lugar, de limitar el problema y enmarcarlo dentro de un marco teórico específico -en este caso, como ya se dijo, se trata de la teoría constructivista de las Relaciones Internacionales-. A esto le sigue un análisis detallado de cómo la política exterior se basa en una serie de construcciones sociales que van tomando forma con el pasar de los años, lo que permite su institucionalización e interiorización. Entre estos elementos de construcción de la identidad norteamericana, parece importante resaltar el tema de la superioridad moral con respecto a los otros países y la licencia que ésta les daría para poder crear políticas ofensivas.

El tercer capítulo se concentra, sobre todo, en explicar cómo funciona la implementación de la doctrina Bush. Ésta, grosso modo, consiste en tratar los problemas migratorios, de narcotráfico y de terrorismo como harina de un mismo costal, lo que implicaría que existe una especie de relación causal entre ellos. La manera más eficaz de combatirlos, según la política norteamericana post 9/11, es por medio de una fuerte presencia militar. Lo que se desprende de lo anterior es que los países que estaban recibiendo apoyo estadounidense debían reformular y re entender las dinámicas de política interior y exterior, teniendo en cuenta estas exigencias. Lo que conlleva serios problemas, por ejemplo, descontextualizar las diferentes luchas armadas catalogándolas todas como terrorismo, significaría que las FARC y ALQEDA serían tomadas como iguales y combatidas de la misma manera, a pesar de las evidentes diferencias.

El cuarto y quinto capítulo girarán alrededor de las políticas interiores y exteriores de Ecuador con respecto a la doctrina Bush. Aquí la autora asegura que, el hecho de que Ecuador sea un país pequeño que no se ve a sí mismo como clave en las dinámicas internacionales, lo hace proclive a obedecer las políticas que los norteamericanos imponen. Además de eso, también explica que existen preocupaciones en común, por ejemplo la guerra contra las drogas -que está ligada con la lucha contra el narcotráfico- y el conflicto interno colombiano.

 

 

 

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